Línea naviera espera reducir su intensidad de CO2 en un 60% para 2030, respecto de 2008

Hapag-Lloyd publicó este 27 de abril su Informe de Sostenibilidad 2020 en el que destaca avances significativos en términos medioambientales, sociales, cualitativos y económicos: «Desde principios del año pasado, la flota de Hapag-Lloyd ha estado operando con fueloil de bajo azufre que cumple con la normativa IMO 2020, reduciendo así sus emisiones de óxido de azufre en aproximadamente un 70% en comparación con 2019. Además, se logró un ahorro de combustible de alrededor del 15% en 39 buques mediante la eliminación de las incrustaciones de sus cascos exteriores», indica la línea naviera.

Al mismo tiempo, señala ser la primera línea naviera del mundo que ha convertido un gran buque portacontenedores a la propulsión de doble combustible, que puede operar utilizando gas natural licuado (GNL). Detalla, además que, en una fase inicial de pruebas, se utilizaron biocombustibles basados en aceite de cocina usado. Por otra parte, menciona que se ejecutó la orden de construcción de seis portacontenedores de última generación -cada uno con una capacidad de más de 23.500 TEUs- cuyos motores de alta presión de doble combustible también podrán funcionar con GNL, reduciendo así las emisiones de CO2 entre un 15 y un 25% aproximadamente.

Estos proyectos de nueva construcción orientados a la sostenibilidad se han financiado mediante dos operaciones de financiación verde, que se concluyeron de acuerdo con los Principios de Préstamo Verde de la Asociación del Mercado de Préstamos (LMA, por su sigla en inglés).

Según la línea naviera basada en Alemania, debido a la pandemia de Covid-19, la seguridad y el bienestar de los empleados tuvieron una prioridad especialmente alta durante el año en cuestión, con el resultado de que más del 90% de sus empleados en tierra debiendo trabajar en parte desde casa. Sin embargo, Hapag-Loyd, reconoció que la pandemia impuso grandes exigencias a los marinos a bordo de sus buques, ya que los recambios de tripulación se vieron considerablemente dificultados por las múltiples restricciones de entrada y muchos de ellos tuvieron que permanecer a bordo mucho más tiempo del previsto inicialmente. Por esta razón, agrega la línea naviera, se hicieron esfuerzos considerables para que regresaran con sus familias y seres queridos de forma segura y lo más rápido posible.

Sin embargo, expone Hapag-Lloyd, el mayor reto en los próximos años seguirá siendo el cambio climático, y habrá que invertir más en investigación y desarrollo relacionados con los conceptos de propulsión y los combustibles a fin de alcanzar el objetivo de lograr la neutralidad climática en el transporte marítimo que actualmente representa el 3% de todas las emisiones de CO2. Por ello, dio al informe de sostenibilidad el título: «Aprovechando el futuro del transporte marítimo». Por supuesto, los portacontenedores siguen siendo el medio más eficiente para transportar grandes cantidades de bienes, también desde el punto de vista medioambiental. Pero incluso con estas ventajas relacionadas con la eficiencia, «está claro que hay que hacer mucho más por la protección del clima», apunta la naviera.

«Hemos avanzado mucho en todas las dimensiones de la sostenibilidad. Al mismo tiempo, somos conscientes de que también tenemos una gran responsabilidad en lo que respecta a la protección del clima. Por ello, seguiremos trabajando duro para modernizar nuestra flota y reducir nuestra huella de carbono. Esto seguirá siendo una parte esencial de nuestra nueva estrategia de sostenibilidad, que publicaremos a finales de este año. En su esencia, se trata de aumentar continuamente nuestra contribución a los esfuerzos relacionados con la sostenibilidad y hacer mejoras incrementales», sostiene Rolf Habben Jansen, CEO de Hapag-Lloyd.

Desde la línea naviera agregan que, con su nueva estrategia de sostenibilidad, se fijarán objetivos específicos para los próximos 10 años. Uno de ellos ya se anunció en marzo de 2021, cuando Hapag-Lloyd colocó con éxito un «bono vinculado a la sostenibilidad» que está conectado a un objetivo de sostenibilidad claramente definido: para 2030, la intensidad de CO2 de la propia flota de Hapag-Lloyd se reducirá en un 60% en comparación con 2008, el año de referencia de la Organización Marítima Internacional (OMI).

Las mejoras en la intensidad de CO2 se medirán y divulgarán anualmente de acuerdo con el indicador llamado Average Efficiency Ratio (AER), que fue de 11,68 en 2008 y se espera que baje a 4,67 para 2030. El REA proporciona información sobre la intensidad de CO2 y se mide en gramos de CO2 por tonelada-milla (gCO2/dwt*nm).

Fuente: Mundomaritimo