La temporada 2024-2025 de la pesca de langostino inició oficialmente el pasado 3 de noviembre, y durante las dos primeras semanas de actividad, los datos preliminares reportados por el Programa de Observadores a Bordo arrojan resultados alentadores.

Entre los expertos aseguran que «es el mejor noviembre de los últimos años», aunque ciertas tendencias llaman «a una evaluación precautoria», advirtieron.

Entre el 3 y el 16 de noviembre, los indicadores clave «mostraron un sólido desempeño», registrándose un promedio de pesca de 2.346 kg/h, superando ampliamente el mínimo requerido de 450 kg/h.

El bycatch de merluza está  por debajo del 15%, con un promedio de solo 2%. La proporción de ejemplares menores a L5 fue apenas el 1% de los ejemplares capturados, respetando el límite del 5%.

Estos resultados «confirman el cumplimiento de los estándares necesarios para mantener abierta el área de pesca y garantizar la sostenibilidad del recurso», detallaron.

Un análisis  detallado evidenció una mayor dispersión del recurso y un aumento en el esfuerzo pesquero. Durante el periodo, se registró un rango de lances por jornada que osciló entre 3 y 10. Los tiempos de arrastre fueron superiores a los estándares habituales, con casos excepcionales de hasta 150 minutos.

El equipo técnico de la Secretaría de Pesca destacó la necesidad de continuar monitoreando estos parámetros. Aunque los resultados actuales respaldan la continuidad operativa, consideran importante evaluar medidas precautorias para mitigar posibles impactos negativos.

Estos datos son preliminares, y aún no fueron cargados los registros de pesca de los días 15 y 16 de noviembre. Se espera que un análisis más completo permita determinar si las tendencias observadas requieren ajustes en la gestión del esfuerzo pesquero.