El Consejo Federal Pesquero aprobó el inicio de la temporada de pesca de centolla para el 15 de octubre, en las zonas S-I y S-III, entre los paralelos 48° y 52° de latitud Sur.

Esta decisión se toma en base a las recomendaciones del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep), y sigue el esquema establecido durante la temporada 2023-2024.

La decisión de comenzar la temporada a mediados de octubre se fundamenta en los resultados positivos de la campaña de evaluación de primavera de 2023. Este estudio reveló una reducción en el descarte de centolla por bajo contenido de carne y permitió a los buques completar sus cupos más rápidamente. Además, adelantar el inicio de la temporada ha demostrado ser beneficioso al reducir la actividad pesquera en diciembre, favoreciendo la presencia de machos adultos en una etapa crítica de su ciclo de vida.

El Inidep concluye que este adelanto no tendrá efectos adversos adicionales sobre la población de centolla.

Con respecto a la solicitud de aumentar la cantidad de trampas con anillos de escape de 120 mm, el Inidep ha decidido mantener la normativa actual. Se mantendrán los anillos reglamentarios en al menos la mitad del parque de trampas de cada buque para obtener datos precisos sobre la captura. Además, se ha recomendado extender el período de prueba de las trampas por al menos tres años para recopilar información suficiente. Esta decisión está en línea con el Informe Técnico Inidep N° 06/2024, que señala que la biomasa de la centolla está por debajo del Punto Biológico de Referencia Objetivo, exigiendo medidas adicionales para su recuperación y la reducción de impactos sobre la población no comercial.

La Dirección de Coordinación Institucional será la encargada de comunicar esta decisión a la Autoridad de Aplicación y a las empresas interesadas. Los buques comerciales habilitados deberán estar listos para iniciar la campaña de investigación a partir del 15 de septiembre de 2024.

La resolución emitida por el Inidep busca equilibrar la sostenibilidad de la pesca con la optimización de los recursos disponibles, asegurando la salud a largo plazo de la población de centolla en el área sur del Atlántico.