La navegación en la hidrovía del Paraná estuvo interrumpida durante 12 horas el domingo a partir de la varadura de un buque de bandera croata. Tras varias horas de colapso de la autopista fluvial, el barco granelero pudo zafar de su varadura asistido por un remocador.

El buque AP Revelin, de 180 metros de eslora, había varado entre San Nicolás y Ramalló, mientras navegaba aguas abajo cargado con 32 mil toneladas de porotos de soja, rumbo a Turquía.

La varadura se produjo a las 23.55 a última hora del sábado en el kilómetro 341,8 del río Paraná y el buque navegaba con un calado de 9,54 metros.

Este año, la Prefectura Naval Argentina estableció un calado máximo de navegación de 8,88 metros, como una medida crítica ante la situación hidrológica del Río Paraná. Hay al menos cinco embarcaciones con un calado de 10 metros que se encuentran detenidas, incapaces de navegar debido a la pronunciada bajante del río.

La bajante del río Paraná preocupa a las autoridades que afirmaron que “hay varios barcos que no salen de los puertos porque el río sigue bajando y, sencillamente, no se puede navegar con el riesgo de quedar varado”. Hay buques fondeados en redas de San Nicolás, Villa Constitución y Rosario.