En el marco del ciclo «Acercar alimentos de productores a consumidores», se abordó el nuevo contexto de comercio digital, que cobró impulso con la pandemia.

El subsecretario de Programas de Desarrollo Productivo, Hernán Rachid, afirmó que “Acercar Alimentos es una usina de creación de varias áreas del Estado para aportar herramientas y trabajar por el acceso a los alimentos y su producción», al participar de la charla del último miércoles en el Ciclo de webinars «Acercar alimentos de productores a consumidores», organizado por la Mesa de articulación interministerial.

En la apertura de la reunión, el vicepresidente del INTA, Tomás Schlichter, destacó el desafío que presenta la inclusión digital. “El comercio electrónico, como todo proceso tecnológico, no es neutral. Las posibilidades de acceso no están equitativamente distribuidas. Se estima que apenas el 30% de las unidades productivas rurales tiene conectividad, por eso es primordial facilitar el acceso de los productores a la tecnología. Es un desafío que debe ser asumido por el Estado y el INTA tiene un rol particular en esto con una agenda de nuevas prioridades que establecen nuevos desafíos. La inclusión digital es una de esas prioridades”.

La actividad contó con la disertación del experto en desarrollo local del INTA, Matías Centeno, un quien describió pormenorizadamente ese nuevo mundo de contactos mínimos y analizó alternativas posibles de comercio electrónico para que los mercados de cercanía incorporen estas nuevas prácticas.

“Los cambios que se están operando plantean nuevas formas de consumir, ya no es válido establecer un único canal de venta, es necesario pensar en varios canales que convivan para contemplar las transformaciones en una sociedad que tiene nuevos patrones de conducta a partir de que consume, estudia y trabaja desde su casa”, señaló Centeno, quien además participa en la organización de una experiencia de feria online de productos de la agricultura familiar que surgió durante la pandemia y fue distinguida por Naciones Unidas.

Ante tal panorama, Centeno subrayó la necesidad de que los pequeños productores comprendan esta nueva realidad y las herramientas que ofrece el comercio electrónico para poder satisfacer las nuevas formas de demanda de los consumidores. “El comercio electrónico mundial tuvo un crecimiento de la facturación de casi un 28 por ciento. En la Argentina, según la Cámara de Comercio Electrónico, el crecimiento fue del 79 por ciento, facturando casi 90 millones de pesos diarios. Es uno de los países en los que más ha crecido el comercio electrónico en el último año. Esto explica por qué muchos insisten en la necesidad de la agenda digital, en subirse a la estrategia digital y empezar a estar en la red. Lo importante es entender que no sirve estar de cualquier manera”.

En este sentido advirtió del surgimiento de dos novedades que marcan el consumo actual: la “desmaterialización” y la economía de bajo contacto. “Se está acelerando la desmaterialización de la economía, bienes y servicios que antes se comercializaban de manera presencial están virtualizados. Ya sucedía con la música, pero ahora hay varias industrias que se desmaterializan, eso implica que hay trabajos que desaparecen y otros que surgen, son cambios profundos. Por otra parte, avanzamos hacia un esquema económico del consumo en donde el contacto está limitado. Desde el comienzo de la pandemia más de la mitad de los consumidores de todo el mundo evitan el uso de efectivo en sus pagos. A partir de la pandemia, una de cada tres Compras se hace en forma digital”.