Después del papelón de Martín Merlini, Presidente del Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata, donde por su inoperancia se perdió el PBIP, dicho en «criollo» la habilitación de seguridad portuaria internacional. Prefectura reestableció la habilitación.

Merlini no sabe a quién culpar de su desmanejo, anda diciendo que Prefectura tomó la medida ( quitar el código ) porque en unos días arriba la Comitiva de la Guardia Costera Estadounidense. La pregunta es… el Puerto estaba o no estaba en condiciones?… la respuesta es obvia…NO.

Prefectura demostró que hace bien su trabajo,  Merlini menospreció el problema (se lo decían hasta en los medios periodísticos que esto pasaría, pero su soberbia no lo dejaba ver, y probablemente sentía que hasta la mismísima Prefectura estaba debajo de él,   las consecuencias eran inevitables (ayer lo vociferaban en todos lados  y ya no por lo bajo) varios Directores del Consorcio y en toda la comunidad portuaria.

Un altísimo Funcionario Nacional dijo… «nos trajo el cadáver» por lo menos nos hubiese traído el enfermo en terapia, pero «como él las sabe todas…» se llegó a esto y terminó involucrando hasta el Puerto de Quequén, ya que tuvieron que cambiar el orden.

Después del papelón nacional e internacional,  que incluso generó hasta pedidos de informes de Diputados, que publicaron  medios periodísticos nacionales. Cómo puede ser que con tanta premura se pueda reestablecer la habilitación? 

PORQUE NO SE REALIZARON TODOS LOS TRABAJOS Y EQUIPAMIENTOS ANTES? Pudiendo haber evitado los altísimos costos actuales,  provocados por la  inflación y la suba del dólar. Todos lo sabían y todos le decían lo que pasaría. 

Desde el descontrol de ingreso, ya sea peatonal como vehicular, la falta de alarmas y cámaras, alambrados perimetrales oxidados caídos y/o rotos, falta de luces y se puede seguir enumerando. Es decir a Prefectura (que avisó varias veces), no le quedaba otra medida que la tomada.

Una total inoperancia y soberbia de Merlini quedó demostrada una vez más,  también se terminó gastando más dinero por hacerlo a las corridas, en Nación dicen que gastó casi  $ 2.000.000 (pesos dos millones).

Cuando comenzaron las observaciones, (equipamiento, mantenimiento, arreglos de alambrados, cableados etc…por lo menos las más urgentes), el dólar estaba a un poco más de $ 17 en octubre del 2.017, la cuenta es muy fácil y salta a las claras el manifiesto desmanejo, es decir hubiese gastado algo más de $ 900.000 si lo hacía oportunamente.   Es decir despilfarró $ 1.000.000 (pesos un millón).

Algo que seguramente se tendrá que explicar ante la Comisión de la Honorable Cámara de Diputados y al Honorable Tribunal de Cuentas de la Provincia.

Merlini saldrá a los medios con bombos y platillos a anunciar que se habilitó nuevamente el Puerto y así tratará de tapar la inoperancia demostrada por su desgestión manifiesta.