Esta «ciudad de las luces»formada por buques extranjeros,en su mayoría chinos, que depredan el calamar, que es el recurso pesquero más preciado que tienen las aguas del Atlántico Sur.

Sólo algunos puntos del planeta se pueden distinguir desde el espacio. Entre otros,  está  Las Vegas o también llamada la«ciudad del pecado» que se observa como una luminosa marca en medio del oscuro desierto de Nevada, Estados Unidos.

Y otro de los sitios visibles se encuentra en el límite del Mar Argentino.

Alli está ubicado uno de los caladeros más importantes del mundo, lugar donde el 70% de los buques que se encuentran en el límite de las 200 millas náuticas son chinos, que son subsidiados por el gobierno de su país, y su crecimiento y actividades no tienen una reglamentación clara, ya que China históricamente tuvo pocas reglas para controlar las operaciones de pesca, y la presencia de las embarcaciones chinas en esta parte del planeta es consecuencia  de una captura excesiva en sus mares lo que empujó a su flota pesquera cada vez más lejos a buscar cardúmenes.

A partir que  se implementó el patrullaje del Mar Argentino, la Prefectura Naval  capturó 80 embarcaciones que se encontraban infringiendo la zona de exclusión, siendo uno de sus máximos logros  conseguir, en 2016, que Interpol detenga en un puerto indonesio al pesquero chino «Hua Li 8» que había atravesado la línea de las 200 millas.

Al respecto el subsecretario de Pesca y Acuicultura de la Nación Carlos Liberman, al ser consultado sobre la pesca en esa zona,  expresó que  «frente a la Zona Económica Exclusiva (ZEE) argentina, en la milla 201, donde las aguas son internacionales y libres, se posiciona una flota extranjera con preponderancia de buques chinos dedicada en general a la pesca del calamar. También se observan flotas europeas, generalmente de España y Portugal en busca de merluza».

Así mismo,  a partir de sanciones más duras, el gobierno argentino endurece el patrullaje en la ZEE del Mar Argentino.

Recientemente , Argentina se sumó al acuerdo de la OMC para limitar subsidios que los más de 160 países miembros de la OMC acordaron en un esquema de prohibiciones a los subsidios dañinos a la pesca que abarcan la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, los stocks de sobrecarga, y los servicios a la pesca en altamar.

Carlos Liberman, destacó los tres principales ejes de esta medida alcanzada en la Organización Mundial del Comercio que son:

la prohibición de subsidiar buques u operadores pesqueros involucrados en pesca ilegal;

prohibición de subsidiar a la pesca en alta mar, más allá de la jurisdicción de los países o fuera de una Organización Regional de Manejo Pesquero;

y la prohibición de subsidiar buques que pesquen poblaciones de peces sobreexplotadas.