Luego de la visita de la Gobernadora la semana pasada, durante la cual  brindó todo el apoyo al intendente Mauro Poletti, en pos de realizar todo lo necesario para destrabar la negociación en Concejo Deliberante de Ramallo que debe modificar la ordenanza del Código territorial que permita la construcción de un puerto, el intendente adelantó su pesimismo y dijo que «personalmente creo que ya la tenemos perdida  ante todas estas dilaciones que sufrió la aprobación del Código», refiriéndose a la inversión de los rusos.

Éstos  tenían  en la mira un terreno cuya superficie de costa es de unos 650 metros lo que permitiría  la construcción de dos muelles en lugar de uno y está ubicado en una zona del río donde el agua corre con fuerza por lo que evita la acumulación de sedimentos y no requería de un dragado constante.

Según el intendente los inversores del Gazprombank  ya están buscando otra alternativa en el sur de Santa Fe, además el intendente fue más allá y expresó que “perdimos una inversión de 500 millones de dólares, más toda la fuente laboral» señaló.

Se le cae la esperanza,  con estas declaraciones del intendente,  a los vecinos de la ciudad que esperaban poder paliar la falta de oportunidades laborales con esta inversión extranjera.

En Ramallo son fuertes las organizaciones ambientalistas y los concejales no están dispuestos a modificar una ordenanza para favorecer a un grupo extranjero por más que éste venga a invertir….dura tarea para los políticos que deberán hacer equilibrio entre los objetivos de generar nuevas oportunidades de inversión y una política ambiental que no perjudique a la zona.

Por lo pronto,el intendente Poletti no avizora una solución al conflicto de intereses suscitado, y tampoco quiere arriesgar su futuro político.