La arena, insumo vital como agente sostén de las fracturas hidráulicas ( fracking) que permiten poner en producción los pozos no convencionales de Vaca Muerta, llega desde las provincias de Entre Ríos y Chubut o bien desde el extranjero (China, Brasil y Estados Unidos).

El esquema logístico del puerto de Bahía Blanca evidencia un rol cada vez más relevante en lo que hace  a la descarga de equipos para Vaca Muerta y también al movimiento de arena importada para dicho yacimiento..

El sistema ferroviario que pasa por la ciudad bahiense  y las rutas de la región son utilizadas para el transporte de arena extraída en Entre Ríos, que es trasladada para el fracking en el sur del país.La arena viaja más de 1.000 kilómetros, primero en camión de Ibicuy a Cañuelas, en la provincia de Buenos Aires, y de ahí a Vaca Muerta en tren.

Hay un plan en esa provincia litoraleña,  para despachar buques con 40 mil o 50 mil toneladas desde el puerto de Ibicuy a los muelles del puerto de Bahía Blanca, cuya iniciativa es el despacho de arena  a granel.

Desde el puerto de Bahía Blanca continuaría en tren hasta donde terminan los rieles  a unos 120 kilómetros de Vaca Muerta, lugar donde se le hará un acondicionamiento final para que  luego sea cargada en camiones, para que lleguen al destino final, o sea, rumbo a los pozos.

La empresa Arenas Argentinas del Paraná, del grupo Jan de Nul, posee en Diamante una planta para acondicionar la arena, desde donde enviaría a Neuquén los sedimentos que extrae del lecho del río, y ya  estaría siendo evaluada como una alternativa para disminuír los costos de la logística de Vaca Muerta.

No menos importante dentro de una serie de alternativas logísticas,  que podrían caerse si se encuentra arena adecuada en Neuquén, es el ramal Norpatagónico o Tren a Vaca Muerta.

Dicho  proyecto, que no ha logrado interés en las empresas petroleras, fue lanzado por el gobierno nacional para bajar costos logísticos.

La arena, dentro de este esquema, es un actor clave y para dimensionar la magnitud del negocio en ciernes basta con mencionar que Vaca Muerta demandará en los próximos 10 años 45 millones de toneladas.